Quisimos perpetuar en el tiempo el nombre de quien supuso un referente en nuestra vida familiar, dedicando la que había sido su casa a recibir a personas interesadas en visitar nuestra tierra, conocer nuestras costumbres y alojarse en un ambiente tranquilo, sin renunciar a la comodidad de poder desplazarse a través de las cercanas infraestructuras y vías de comunicación modernas.
La fecha de construcción de la casa es incierta, aunque tenemos documentación que la sitúa como objeto de herencia muy principios del siglo XVIII (Año 1703).
Existe constancia de que la construcción de nuestro “Casal”, en torno al cual crecieron otras construcciones rústicas y viviendas, fue el germen de este núcleo rural situado en el Ayuntamiento de Teo, en el que se desarrolló la tradicional vida campesina de la época.
Hoy, con la construcción de nuevas viviendas y de nuevas infraestructuras, seguimos estando en un entorno privilegiado, aunque bien comunicado con cualquier parte de Galicia, con todos los servicios necesarios a menos de 1 km, con la cercanía de la capital de Galicia, Santiago de Compostela y de su emblemática Catedral y la tranquilidad del rural gallego, que permitirá a nuestros visitantes realizar interesantes rutas por parajes de gran belleza natural.
